jueves, 6 de noviembre de 2008

METANFETAMINA


¿Qué es la metanfetamina?


La metanfetamina es un estimulante sintético (fabricado por el hombre) que resulta altamente adictivo. Se abusa de esa droga porque produce efectos de euforia, a veces descritos como sensación de bienestar, que pueden durar hasta 24 horas. La metanfetamina se produce a un costo relativamente bajo, por lo que resulta fácilmente asequible y accesible para los adolescentes.

¿Qué
apariencia tiene?


Habida cuenta de que la metanfetamina se puede producir empleando una gran diversidad de métodos, su apariencia puede variar drásticamente. La droga se vende en polvo, a veces cristalino, o como trozos de piedra. El color de la metanfetamina también varía. Se ha visto metanfetamina de color blanco, amarillo, pardo, gris, naranja, y rosa.

¿
Cómo se abusa de la metanfetamina?


La metanfetamina se puede inyectar, fumar, aspirar, o ingerir oralmente. Cuando se inyecta o se fuma, la droga produce un efecto estimulante inmediato e intenso. La sensación de euforia que resulta de aspirar o ingerir la droga no es tan intensa y requiere más tiempo para que surta efecto, de 3 a 5 minutos si se aspira, y de 15 a 20 minutos si se ingiere por vía oral.

¿
Quiénes usan la metanfetamina?


En el pasado, el usuario típico de la metanfetamina era el hombre adulto con ingresos inferiores al promedio. Sin embargo, en la actualidad, personas de todas las edades y de todos los niveles económicos usan metanfetamina. Datos de la National Household Survey on Drug Abuse (Encuesta Nacional de los Hogares acerca del Abuso de Drogas) indican que unos 9,6 millones de residentes de los Estados Unidos de 12 años de edad o más usaron metanfetamina al menos una vez en la vida. La encuesta reveló asimismo que muchos adolescentes y adultos jóvenes usan metanfetamina: 338.000 personas entre 12 y 17 años y 1,5 millones de personas entre 18 y 25 años usaron la droga al menos una vez.
El uso de la metanfetamina entre los alumnos de la enseñanza media presenta un problema especial. Cerca del 7 por ciento de los estudiantes de último año de la enseñanza media en los Estados Unidos usaron la droga al menos una vez en la vida, y cerca del 2 por ciento la usaron durante el mes precedente, según la encuesta Monitoring the Future (Vigilancia del Futuro) realizada por la Universidad de Michigan.

¿Qué riesgos
presenta?


El uso de la metanfetamina se asocia a muchos trastornos físicos graves. La droga puede causar aumento del ritmo cardíaco, subida de la presión arterial, y daño a los pequeños vasos sanguíneos del cerebro, lo que puede conducir a un derrame cerebral. El uso crónico de la droga puede producir inflamación del revestimiento del corazón. La sobredosis de metanfetamina puede causar hipertermia (elevada temperatura corporal), convulsiones, y la muerte.
Las personas que abusan de la metanfetamina también pueden sufrir episodios de conducta violenta, paranoia, ansiedad, confusión, e insomnio. La metanfetamina también puede producir síntomas psicóticos que duran meses o años luego de que la persona deja de usar la droga.
Los usuarios de la metanfetamina que se inyectan la droga se exponen a otros riesgos, entre ellos el de contraer el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), la hepatitis B y la C, y otros virus transmitidos por la sangre. Los usuarios crónicos de metanfetamina que se inyectan la droga también corren el riesgo de sufrir de venas colapsadas o callosas, infecciones del revestimiento y las válvulas del corazón, abscesos, neumonía, tuberculosis, y enfermedades hepáticas y renales.

La Adiccion a los Psicofármacos


Cuando hablamos de la dependencia a determinadas sustancias, muchas veces no tenemos en cuenta que hay fármacos que usados desproporcionadamente, fuera de su contexto y sin un control regular y estricto, pueden ser causantes de un proceso adictivo importante y difícil de controlar.
Éste es el caso de muchos psicofármacos, medicamentos usados para dar respuesta a problemas psicológicos y de conducta, como los ansiolíticos y los hipnóticos.
Cada vez hay más gente que, debido a un ritmo de vida acelerado, a la acumulación de tensiones y a la mala canalización de expectativas y sentimientos, puede desencadenar procesos importantes de ansiedad, insomnio y estrés.
La respuesta a esta sensación de malestar psicológico es, en muchas ocasiones, la medicación. En estos casos, los fármacos son una ayuda, un cojín para encauzar un problema psicológico: ayudan a regular determinados neurotransmisores, y la respuesta a tal acción es una mejora sustancial de los síntomas negativos que percibe el afectado.
Según estadísticas internacionales, las mujeres mayores de 40 años, son las que más consumen psicofármacos, en una proporción muy superior a los hombres de la misma edad, y a otras mujeres más jóvenes.

Al principio un diazepam para la ansiedad, una fluoxetina para la depresión, otro día un alprazolam y así poco a poco comienza la drogodependencia de psicofármacos que es también una adicción, aunque muchas no lo crean, y solo cuando comienzan a padecer sus consecuencias suena la señal de alarma.

jueves, 30 de octubre de 2008

EL EXTASIS


Los derivados de la anfetamina, como el éxtasis o la metanfetamina, son las únicas drogas con investigaciones que prueban una destrucción progresiva del cerebro.

Esto provoca una serie de efectos nocivos como problemas de memoria, alteraciones cognitivas, impulsividad, depresiones o trastornos de sueño, si bien la aparición de estos síntomas no está comprobado que se produzcan por esta falta de serotonina derivada del consumo de esta sustancia psicoactiva

Las muertes relacionadas con el éxtasis son raras en comparación con las producidas por consumo de opiáceos, pero siguen siendo motivo de gran preocupación entre la opinión pública, probablemente debido a la edad de las víctimas y a los efectos totalmente inesperados. El término "muerte relacionada con el éxtasis" debe ser objeto de una definición más precisa. En la actualidad, podría significar que en el certificado de defunción se menciona esta sustancia o que se han encontrado restos de la misma en los análisis toxicólogos (con frecuencia en combinación con opiáceos, alcohol, cocaína y otras drogas).

Las emergencias hospitalarias pueden considerarse asimismo como un indicador de los graves problemas de salud relacionados con el consumo de esta sustancia.

Algunas muertes relacionadas con el éxtasis podrían evitarse con medidas relativamente simples, como mejorar la ventilación pulmonar, suministrar agua o fomentar conductas más sanas impartiendo educación en materia de salud. En otros casos parece que la muerte se debe a una reacción idiosincrásica a la droga.
Estas reacciones inciertas son difíciles de prevenir y por lo tanto las posibilidades de intervención, exceptuada la asistencia médica, son limitadas, siempre se trata la urgencia, pero jamás los emergentes que afectan a una sociedad, hay que prevenir, anticipar los hechos.
La Argentina carece de medios para llevar controles en las guardias de los hospitales, realizar campañas de prevención focalizadas, en especial, la costa atlántica, y los boliches de moda, donde existen clases sociales medias y altas, no hay informes anuales de cuántas muertes por esta droga, ya que en muchos casos se la confunde con el coma alcohólico, hay que informar y el estado debe acompañar con políticas preventivas al respeto, para mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos y ahorrar dinero para el futuro.

jueves, 23 de octubre de 2008

La Drogadependencia


La drogadicción es un grave problema social. El adicto, su familia, amistades y la comunidad donde se desarrolla este son los principales perjudicados por esta actividad.El que cerca de 200 mil drogadictos mueran al año en el mundo indica el preocupante aumento en el número de personas que ingieren drogas ocasionalmente o que ya son adictos y que están fuertemente influidas o relacionadas con el aumento de la violencia social.


Existen tres términos diferentes utilizados para definir los trastornos relacionados con las sustancias químicas:


_Drogadicción"Drogradicción" se utiliza para describir un patrón de uso de sustancias (drogas) que conduce a problemas o preocupaciones graves como faltar a la escuela, usar drogas en situaciones peligrosas (manejar un carro), problemas legales relacionados con las drogas, o el uso continuo de una sustancia que interfiere con las relaciones familiares o con los amigos.


_"Drogadicción", como trastorno, se refiere al abuso de sustancias ilegales o al uso excesivo de sustancias legales. El alcohol es la sustancia legal de la que se abusa más frecuentemente.
Dependencia de drogas"Dependencia de drogas" se utiliza para describir el uso continuo de drogas o alcohol, incluso cuando se han desarollado problemas graves relacionados con su uso. Las señales incluyen un aumento de la tolerancia o una necesidad de tomar cantidades mayores de la sustancia para obtener el efecto deseado, síntomas del síndrome de abstinencia cuando se disminuye el uso, esfuerzos fallidos para disminuir el uso, aumento del tiempo dedicado a las actividades para obtener las sustancias, abandono de las actividades sociales y recreativas, y un uso continuo de la sustancia incluso cuando se conocen los problemas físicos o psicológicos producidos por uso de la sustancia.


_Dependencia química"Dependencia química" también se utiliza para describir el uso compulsivo de sustancias químicas (drogas o alcohol) y la incapacidad de dejar de utilizarlas a pesar de todos los problemas causados por su uso.


El abuso de drogas puede conducir a la adicción o dependencia de las mismas. La dependencia de las drogas también puede ser consecuencia del uso prolongado para el alivio del dolor físico, aunque es inusual que esto suceda en personas que no tienen antecedentes de adicciones.

La causa exacta de la dependencia y el abuso de drogas se desconoce. Sin embargo, el modo de ser del individuo, la farmacología de cada droga en particular, la presión de compañeros, los problemas emocionales, la ansiedad , la depresión y el estrés ambiental son factores importantes en la aparición de la adicción.


Los riesgos que predisponen a las personas a la adiccion son distintos de los que predisponen al uso o abuso. La presión de los compañeros puede llevar al uso o abuso, pero al menos la mitad de los individuos que caen en la adicción sufren depresión, trastorno por déficit de la atención, estrés postraumático u otro problema sicológico.

¿Qué es la droga?


La Organización Mundial de la Salud define una droga como una sustancia (química o natural) que introducida en un organismo vivo por cualquier vía (inhalación, ingestión, intramuscular, endovenosa), es capaz de actuar sobre el sistema nervioso central, provocando una alteración física y/o psicológica, la experimentación de nuevas sensaciones o la modificación de un estado psíquico, es decir, capaz de cambiar el comportamiento de la persona.


Cuando se consumen drogas adictivas repetidas veces y durante un periodo de tiempo prolongado, el efecto de dichas drogas es cada vez menor. Para que se produzca el mismo efecto de los primeros consumos, es necesario aumentar la dosis de droga. Este proceso significa que el consumidor ha desarrollado tolerancia a las drogas de consumo.


Al mismo tiempo, se desarrolla un proceso por el que cuando deja de consumir drogas, el consumidor se pone enfermo. Es porque se ha convertido en un adicto del consumo de dichas drogas, drogadicto, y si se interrumpe este consumo abruptamente, aparecen los síntomas de la abstinencia, que se eliminan volviendo a tomar drogas. La tolerancia y la adiccion a las drogas están estrechamente relacionadas, ya que la drogadiccion acompaña normalmente a la tolerancia, y los dos procesos son resultado de cambios bioquímicos en el cerebro del consumidor habitual de drogas.


La dependencia de las drogas (adicción)es el uso compulsivo de una sustancia a pesar de las consecuencias negativas, las cuales pueden ser severas; el abuso de las drogas es simplemente el uso excesivo de una droga o el uso para fines distintos a los propósitos médicos.


La dependencia física de una sustancia (necesitar una droga para desempeñarse) no es condición necesaria ni suficiente para definir la adicción. Hay algunas sustancias que no causan adicción, pero que sí provocan dependencia física (por ejemplo, algunos medicamentos para la presión sanguínea), y sustancias que causan adicción pero no la clásica dependencia física (por ejemplo, la abstinencia de la cocaína no trae síntomas como vómitos ni escalofríos; en cambio se caracteriza principalmente por la depresión).


Una droga surte efecto tan pronto como alcanza el cerebro, donde actúa sobre sus receptores. En la tolerancia metabólica, ante la repetición del consumo de una droga el cuerpo va aumentando su capacidad para destruirla y se va adaptando a dicha droga. Entonces la dosis que antes era efectiva, pierde gradualmente su capacidad de producir efectos. Cada repetición de la dosis inicial hace que cada vez llegue menos droga, y durante menos tiempo, a los sitios del cerebro donde actuaba. Y por tanto, es necesario aumentar gradualmente las dosis de drogas para poder experimentar el efecto deseado. La tolerancia metabólica se produce, así, si una droga hace que aumente la producción de la enzima que destruye a esa misma droga.


La tolerancia celular resulta de cambios fundamentales en el propio cerebro. Las neuronas se adaptan a las drogas, de manera que ante un consumo continuado, son cada vez menos sensibles a sus efectos. Así, la dosis tiene que ser aumentada para poder experimentar con toda la intensidad los efectos originales de la droga. A medida que las neuronas se van adaptando a dosis cada vez más altas de drogas, funcionan de forma aparentemente normal a pesar de estar “bañadas” en droga. En este estado, cuando el efecto de una dosis apenas ha desaparecido, permanece en el cerebro una cantidad considerable de droga. Cantidad que ahora aparentemente no hace efecto, pero que si se hubiese consumido la primera vez que se administró la droga, hubiese causado efectos severísimos en el comportamiento, o incluso la muerte. La normalidad aparente de las funciones cerebrales enmascara así un cambio neuroquímico subyacente que sólo se manifiesta si se deja de consumir la sustancia adictiva. En definitiva, el cerebro se ha vuelto adicto de la droga o sea drogadicto.